momentos…

Y es que no debemos olvidar, que de la vida lo único bueno que recordaremos al fin y al cabo, son los buenos momentos que nos brinda de vez en cuando. Momentos, que a veces jamás podrían tener explicación, o que en la vida habrías imaginado que te ocurrirían, pero sí, sí te han ocurrido.

Pero creo que cometemos un pequeño error, no lo vivimos con la intensidad y el valor con lo que deberíamos hacerlo, pero al fin y al cabo creo que es ahí donde se encuentra la verdadera esencia de la importancia de esos efímeros e intensos momentos.

A veces sólo es una sonrisa, otras veces un beso… o simplemente un hecho como ver una estrella fugaz por primera vez…; que sensación más extraña, pero a la vez placentera.

En fin, así es la vida una caja de sorpresas, a veces buenas; otras no tanto, y otras por su parte diferentes.

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